- El masaje en la región abdominal, ayudará a madurar el sistema gastrointestinal del recién nacido; también lo regulará.
- El bebé se sentirá relajado si le damos un baño con agua templada. Así, beneficiaremos su tránsito intestinal.
- Debemos evitar, en la medida de lo posible, la estimulación anal con termómetros u otros objetos que pudieran llegar a producir lesiones.
- Si el niño se alimenta con leche infantil, será muy importante seguir las pautas de dosificación especificadas en el envase correspondiente.
- Si tenemos la oportunidad de elegir, utilizaremos leches infantiles que no favorezcan el estreñimiento. Es por ello, por lo que optaremos por aquellas leches que beneficien la digestibilidad.
- Por recomendación pediátrica, a los 4 ó 6 meses, podemos iniciar el consumo de compotas o purés de frutas y verduras, ricas en fibras.
- Dependiendo de la edad del pequeño, podemos incluir en su dieta algunos alimentos ricos en fibra: naranja, espinacas, lentejas, avena, cereales integrales,…
- Así pues, también controlaremos el consumo de alimentos que provocan deposiciones duras: plátano, manzana sin piel, zanahoria o arroz.